miércoles, 1 de diciembre de 2010

El efecto invernadero

La temperatura media de nuestro planeta, la Tierra, es ideal para la vida. Esto no ocurre con otros planetas de nuestro sistema solar. La Tierra recibe
el calor del Sol. Algunos gases de la atmósfera lo retienen y evitando que se escape de retorno al espacio. Debido a la contaminación de la atmósfera, hoy en día, estos gases retienen mucho calor cerca de la superfície.

Por ello llamamos efecto invernadero al proceso por el que ciertos gases de la atmósfera retienen gran parte de la radiación infrarroja emitida por la Tierra y la reemiten de nuevo a la superficie terrestre calentando la misma. Estos gases han estado presentes en la atmósfera en cantidades muy reducidas durante la mayor parte de la historia de la Tierra.

Aunque la atmósfera seca está compuesta prácticamente por nitrógeno, oxígeno y argón, son gases muy minoritarios en su composición como el dióxido de carbono , el ozono y otros los que desarrollan esta actividad radiactiva. Además, la atmósfera contiene vapor de agua que también es un gas radiactiva-mente activo, siendo con diferencia el gas natural de efecto invernadero más importante. El dióxido de carbono ocupa el segundo lugar en importancia.


El efecto invernadero es esencial para la vida del planeta: sin CO2 ni vapor de agua (sin el efecto invernadero) la temperatura media de la Tierra sería unos 33 °C menos, del orden de 18 °C bajo cero, lo que haría inviable la vida.